El piloto de Ducati, que salió ileso del espectacular accidente, fué despedido de su moto y voló sobre la línea de meta de Sepang. Un problema con un neumático le hizo irse al suelo. Está ileso de milagro.
La caída ocurrió justo delante de boxes y todos los presentes acudieron rápidamente al punto del accidente, temiendo por la vida del piloto, que se arrastró más de 300 metros pero no impactó contra el muro, aunque su moto casi le arrolló tras rebotar.
Loris Baz, uno de los pilotos más altos del Mundial, se levantó magullado pero incluso volvió salir a pista después de que los entrenamientos estuvieran suspendidos durante casi una hora.
La hipótesis más probable, aunque por confirmar, es la de una explosión de un neumático, ya que la goma trasera de la Ducati quedó destrozada. Michelin, por precaución, retiró a los equipos las gomas blandas, como la del accidente y explicó que ha enviado el neumático a Clermont Ferran para aclarar lo sucedido.
