A partir de su introducción en 1985, la Suzuki GSX-R 750 fué una sensación. Era el eslabón que faltaba entre el circuito y la carretera. Una verdadera Superbike con ropa de calle, para coger la carretera como un profesional, algo que podia ser difícil con un modelo similar.
Después con el tiempo, se convirtió en la moto de todos los tópicos, nada importante, puesto que fué ella la que los inventó.
No impidió que esta deportiva cogiera un poco de peso durante los años 90, para volverse a poner de régimen y avanzar hacia el nuevo siglo. 23 años más tarde, la Suzuki GSX-R no tiene ni una arruga, ni siquiera consiguiendo reinventarse, lo que siendo, más bien, la única en su categoría.
Basta con observar el pedigrí de los otros miembros de su familia para estar tranquilo sobre la calidad de sus genes. Se tiene prisa por ver lo que nos van a traer para el próximo aniversario en el 2010. Aquí te dejo unas imágenes de la Suzuki GSX-R 750 desde 1985 a 2011.