Me ha atrapado, cierto, debo reconocer que me ha atrapado esta moto. No sé si es ese cromado naranja del carenado, o de las llantas, o de las estriberas, o de la cúpula. Tal vez sean esos latigillos metálicos naranjas, esos guardabarros en carbono, o tal vez sea el conjunto completo. Pero sí, me ha atrapado, debo reconocerlo.
A veces nos comemos mucho la cabeza para destacar, para que nuestras motos sean atrayentes, que nos miren al pasar y buscamos los accesorios más extraños y caros del mercado. Pero a veces, una buena idea, una buena visión de como podria quedar tu moto con unos pequeños detalles, hace que en un futuro tu moto se convierta en un arma para atrapar al resto de moteros que la vean. En este caso, a mi, me ha atrapado y mucho.
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