Proliferan desde hace muchos años en los circuitos Norteamericanos, dando rienda a todo el poder que esas motos pueden obtener a través de multiples modificaciones, tanto estéticas como mecánicas.
La Hayabusa para ellos marcó el principio de una nueva era, anteriormente marcada por las Suzuki GSX-R 1100, propias para transformar motor e intentar dar el máximo en pista.
Con la Hayabusa, los amantes de las Dragsters encontraron una máquina potente ya de serie, una extremada aerodinámica y un sinfin de mejoras ideales para conseguir posteriormente una moto fantástica para tal motivo.
De ese paso a tomar cualquier cilindrada y convertirla en un dragster es tan solo un paso, los norteamericanos avanzan en ese sentido, tal y como puedes ver en las imágenes que te muestro.
En España no tenemos nada de esto, aunque a un paso de nuestro país tenemos buenos equipos franceses e ingleses, bien preparados y con un buen equipo técnico a sus espaldas.